Llegamos a la ultima columna del año y repasando los distintos temas que tocamos en estas ediciones 2017 bajo el mismo eje de “Lo que el Running me da” encontramos: “FUERZA”, “AMIGOS”, “SALUD”, y “FELICIDAD”. Seguramente esta última abarque muchísimo, pero aún así creo que un montón de cosas quedaron afuera, porque es tanto lo que el Running nos da que es muy difícil escribirlas a todas, no olvidarse de ninguna. Cuando un año va llegando a su fin para muchos es el momento de hacer balances, análisis, o simplemente de pensar cuales fueron las cosas que sumaron en nuestra vida, y las que no. Yo siempre digo que está bueno mirar para atrás para repetir o modificar lo que haga falta en busca de una “para adelante” más feliz. En ese sentido no es malo mirar “para atrás”. Seguramente si corres podes recordar miles de situaciones que tienen que ver con correr y te hicieron feliz a lo largo del año. Gente nueva y linda que conociste, marcas que superaste, entrenamientos y carreras que disfrutaste, viajes, momentos divertidos con amigos que comparten tu misma pasión, y la lista no tengo dudas que seguiría. Dudo que alguien sienta que correr le restó más que sumar. ¿Mi conclusión? es tanto pero tanto lo que correr nos da, lo que podemos ganar corriendo, que me dan ganas de decirle a todo aquel que no corre que se esta perdiendo algo muy grande. Ya se.. tampoco esta bueno volverse fundamentalista o fanático, pero realmente así lo siento en mi cuerpo y en mi corazón. Seguramente muchísima gente encuentre en otras actividades lo que nosotros los corredores apasionados en el running, pero a mi me toca estar de este lado.
De las tantas cosas que quedaron afuera de estas columnas y se suman a los beneficios de nuestro deporte, así en un instante se me aparecen estas en la cabeza: Confianza. Porque me ayuda a sentirme mejor conmigo misma: me propongo desafíos que al alcanzarlos pueden hacerme creer que si pude con eso voy a poder también con otras cosas en la vida. Determinación. Porque me ordena, me ayuda a tener disciplina, a ser prolija. Si tengo que entrenar para algo puntual que significa mucho para mí, me vuelvo una soldado. Cumplo, me ordeno, hago las cosas como debo y establezco prioridades dejando de lado lo que me cuestan pero no es compatibles para conseguir mi objetivo. Claridad. Porque cuando estoy confundida o agobiada, o debo tomar una decisión que me cuesta, después de correr puedo hacerlo mejor, correr me alivia la cabeza y despeja para pensar con más tranquilidad e incluso optimismo y tolerancia.
Definitivamente creo que correr nos puede hacer mejores personas.
Esto es lo que se me viene a la cabeza a mí, y desde ya cada uno tiene sus motivos para correr: personales, únicos, y seguramente hermosos. El running nos aporta distintas cosas, pero seguramente en lo que coincidimos todos, es que nos hace bien, por dentro y por fuera. Por eso, nunca dejes de correr, nunca dejes de soñar. ¡Muy feliz año, y hasta la próxima!